FÚTBOL: Negaron libertad a Sandro Rosell que deberá permanecer en prisión
Sandro Rosell, acusado de apropiarse de 6.5 millones de euros en la venta de derechos audiovisuales de partidos amistosos de la selección brasileña, deberá permanecer en prisión luego de que la jueza Carmen Lamela negara su libertad.
Se trata de la segunda vez que desde la Audiencia Nacional se oponen a su excarcelación, ya que el pasado día 4 la Sala de lo Penal desestimó el recurso de apelación que interpuso contra la decisión de Lamela de enviarle a prisión provisional.
En el auto en el que deniega la libertad a Rosell, la juez rechaza también dejar libre a otro de los detenidos en la operación Rimet, el abogado y político andorrano Joan Besolí, al que se le atribuye la creación de empresas en el Principado con las que supuestamente se blanqueó el dinero.
Según Lamela, aún persiste el riesgo de fuga, de destrucción de pruebas y de reiteración delictiva, ya que existen “fundados indicios” de la presunta participación de ambos en delitos de pertenencia a organización criminal y de blanqueo de capitales.
Respecto al arraigo invocado por Rosell para conjurar el riesgo de fuga, la juez cree insuficiente que tenga nacionalidad española, propiedades en España y dos hijas que viven en este país, ya que la investigación ha puesto de manifiesto su facilidad para viajar y vivir temporalmente en distintos lugares de todo el mundo.
Recuerda, en este sentido, que posee “una gran fortuna”, así como cuentas y bienes fuera de España, que le facilitarían su huida y su subsistencia en otros países.
La juez también cree que de quedar en libertad podrían ocultar o destruir pruebas, ya que aún no ha concluido la investigación, y podrían además caer en reiteración delictiva puesto que operan “dentro de un grupo organizado de personas que son investigadas también por otros países como Estados Unidos, Andorra o Suiza”.
Otro de los motivos para mantenerles en prisión es que el senado de Brasil estudia iniciar investigaciones por hechos entro los que se encuentran las actividades irregulares que se les atribuyen.
Para los jueces, “su notoriedad pública” solo podría dificultarle sustraerse de la justicia en España, “pero no en otro países donde no goce de esa notoriedad, sin olvidar que también hay muchas personas que no están interesadas por el deporte y desconocen a quienes se dedican a ello”.