TENIS: Nadal derrota a Anderson y gana el US Open 2017
Tiene 31 años, es el número 1 del ranking.
El número uno desborda al gigante sudafricano en la final de Nueva York (6-3, 6-3 y 6-4, en 2h 27m) y rubrica su tercer triunfo en Flushing Meadows, el segundo grande del año y su 16º Grand Slam
Nadal logró ayer su 16° Grand Slam. Fue el tercero en Flushing Meadows y el 74° título de una vida plagada de éxitos. Pero lo que más sorprende en Nadal es que a los 31 años, habiendo ganado absolutamente todo en todos lados, todavía siga luchando por más. La razón es simple de entender pero difícil de llevar adelante para cualquier mortal: es que él representa a esa raza de elegidos que no juega contra los demás. Porque lo hace contra los records. Y contra la historia. Como lo hacen hoy también Roger Federer y Novak Djokovic. O como lo hicieron Pete Sampras, Roy Emerson, Rod Laver y Bjorn Borg. O hasta el propio Bill Tilden en una época absolutamente diferente a la del deporte-show súper profesional de hoy. Son elegidos. Tocados. Hombres que nacieron para sorprender. Y maravillar…
Lo particular en Nadal es que tuvo la capacidad de reinventarse una vez más a los 28 años. En su cuerpo y en su juego. Cuando para muchos ya estaba acabado por sus problemas físicos y -como directa consecuencia de ellos- tenísticos que lo empezaron a atormentar después de perder en los cuartos de final de Wimbledon en 2014, se rehízo.